lunes, septiembre 03, 2007


A la orilla del mar, dejé mis sueños
y caminé por la playa sin pensar
En silencio mis lágrimas corrieron
presurosas a unirse en salinidad
*
Sin darme cuenta vino la noche
y con ella el frío amenazante
El cielo se perdió entre las olas
cuyo murmullo fue alzando su voz
*
Estaba sola caminando descalza
herida por la escarcha
y hundida en el dolor
*
En ese momento el silbido del viento
me recordó tu mano,
y lo feliz que fuí a tu lado,
Recordé tu risa en mi oído
y en mis hombros tu abrigo.
*
Añoré tus alegres ojos
anhelé tus latidos
y tus secretos más profundos.
*
Me hablabas de eternidad
de alegría y libertad, de santidad,
de perdón y sanidad.
*
Trajiste ante mí
lo que deseaba mi corazón
Me obsequiaste tu sangre
me brindaste tu perdón
*
Y recordé tus besos en mi frente
el perfume de tu cuello
la hermosura de tu rostro
y tu amor...mi consuelo
*
Entonces corrí a buscar mis sueños
pero ya no estaban
y el agua llegó a mis rodillas,
buscando entre las olas,
viendo...
como mi pasado se alejaba
*
El viento silbó otra vez
pero esta vez no trajo
sólo un recuerdo
*
Sino a ti mi amado y mi dueño.
*
Te Amo Jesús